Para recibir consejos celestiales que nos ayuden a mejorar nuestra vida, no es necesario recurrir a una persona que haga lecturas angélicas o que tenga poderes especiales. Estos mensajes están destinados a todos los seres humanos y Dios desea que los recibamos de la forma más sencilla posible. Muchas de las personas que me han consultado o han participado en mis grupos de trabajo han aprendido a utilizar el servicio de mensajería celestial. Han aprendido a ser conscientes de la presencia de sus ángeles y a ser receptivas a los mensajes que intentan transmitirles y eso es algo que todos podemos hacer.
Hablo de personas normales y corrientes, que no poseen ningún talento especial que tú no tengas. Estoy convencida de que todos tenemos un sexto sentido. Es más, creo que ese sexto sentido que nos permite a los seres humanos contactar con los mensajeros celestiales no es sino la presencia de Dios en nuestro interior. Esto es algo que todos podemos hacer (o aprender a hacer) en cualquier momento, porque eso con lo que intentamos contactar ya se encuentra en nuestro interior.
Al recibir los mensajes celestiales estamos actuando como nuestro propio canal de comunicación y el de Dios. Nosotros mismos somos el sexto sentido. Una vez que hemos aprendido a sintonizar con nuestros sentimientos, pensamientos, visiones y sonidos internos, es fácil recibir y comprender los consejos de los ángeles.
(Lo que nos dicen los ángeles - Doreen Virtue)